El Diplomado se basó en la ley 1876 de 2017 sobre el Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria –SNIA-, la cual indica que la Extensión Agropecuaria es el proceso de acompañamiento en el cual se gestiona el desarrollo de los productores agropecuarios, su articulación con el entorno y el acceso al conocimiento, tecnologías, productos y servicios de apoyo; con el fin de hacer competitiva y sostenible su producción al tiempo que contribuye a la mejora de la calidad de vida familiar.
La formación académica se dividió en 4 horas virtuales durante cuatro semanas y 8 horas diarias presenciales durante una semana, tiempo en el que los Tomasinos adquirieron competencias para interactuar con los agricultores, sus organizaciones y otros actores, donde podrán facilitar su acceso al conocimiento, la información y las tecnologías; permitir su interacción con agentes de investigación, educación, agroindustria y otras instituciones importantes y apoyarlos en el desarrollo de sus propias competencias y prácticas técnicas, organizacionales y de gestión.
“Esta experiencia fue muy enriquecedora dado que nos sitúa en el contexto de la extensión desde la perspectiva tanto del campesino como del extensionista, también nos da a conocer las leyes que rigen el sector para trabajar de la mano de estas en pro de mejorar la calidad vida de las comunidades rurales. Sin duda, este diplomado fortalece mi perfil profesional como egresado de la SANTOTO”, puntualizó Edison Alberto Galindo.
Asimismo, para Javier Enrique Vargas Bayona, docente de la Facultad este curso: “permitió fortalecer las competencias en la gestión del conocimiento, haciendo una combinación entre el tácito y el explícito, es decir, se conjugaron las tradiciones orales y la experiencia de los investigadores, generando un nuevo conocimiento tanto para el productor como para el extensionista”.
De esta manera la SANTOTO destaca el compromiso de sus docentes, estudiantes y egresados en la formación de extensión rural; herramienta direccionada a promover el desarrollo económico y social de los productores rurales, gracias a un permanente proceso de formación y capacitación en el que están involucrados técnicos, productores y organizaciones.