Su presencia requirió un esfuerzo conjunto por parte de la Universidad Santo Tomás, que, gracias a su liderazgo en la región y su relacionamiento internacional, atrajo a estos jóvenes franceses, así como la llegada de 21 nuevos estudiantes aventureros que seguirán enriqueciendo la cultura local y aportando al país con sus tradiciones, costumbres y perspectivas francesas. En cada una de sus palabras, estos jóvenes extranjeros contaron cómo se enamoraron de nuestra cultura, paisajes inigualables y de la alegría, calidez y amabilidad de nuestra gente, que los acogió en muchos rincones de Colombia y que, estamos seguros, permanecerán con ellos por siempre.