Este proyecto hace parte de la Sexta Convocatoria Interna de Investigación, y tomó como estudio dos puntos de muestreo: la Escuela Normal Superior de Bucaramanga y los Campus de la Universidad Santo Tomás.
Durante un año de investigación se han realizado diversas actividades, como el Taller de Creación, a cargo de la experta internacional Diana Wiesner, dirigido a funcionarios del área metropolitana de Bucaramanga y a la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga - CDMB.
Por otra parte, los estudiantes del semillero capacitaron a los funcionarios de la SANTOTO encargados del cuidado de las zonas verdes, con el fin de sensibilizar sobre la recuperación, renovación, poda y manejo de la vegetación de los Campus.
Finalmente, desde el semillero se ha elaborado una plantilla de biodiversidad con fotografías de las especies de bosque seco tropical, que es el ecosistema al cual pertenece Bucaramanga y su área metropolitana, con el objetivo de reconocerla e identificarla.
“Invitamos a toda la comunidad Tomasina a que se vincule a entender la importancia que tiene manejar nuestras propias especies nativas, además, nuestros estudiantes cuando reconocen el patrimonio biodiverso lo podrá aplicar en las propuestas de diseño arquitectónico para los ciudadanos y la administración del territorio”, manifestó Eneyda Abreu Plata, docente de la Facultad de Arquitectura y líder del semillero FACARQ.